Una joya que captura la esencia de la elegancia y lo atemporal.
Elaborado en oro de 18K, este anillo enmarca esmeraldas naturales de intenso color verde, símbolo de renacimiento, abundancia y amor. Su diseño refinado resalta la belleza única de la piedra, haciendo de esta pieza el regalo perfecto para momentos inolvidables o para quienes buscan un accesorio con carácter y distinción.